jueves, 12 de noviembre de 2020

LA ADICCIÓN A LOS "SMARTPHONES" EN LOS JÓVENES



Casi una cuarta parte de los jóvenes dependen tanto de sus teléfonos móviles que se convierte en una adicción, según un estudio del King's College de Londres. Este comportamiento adictivo significa que las personas se vuelven "aterradas" o "molestas" si se les niega el acceso al teléfono y tampoco pueden controlar la cantidad de tiempo que pasan con él. El estudio advierte que tales adicciones tienen "graves consecuencias" para la salud mental.

El estudio encontró que el 23% tenía un comportamiento similar al de una adicción, como la ansiedad por no poder usar su teléfono, no poder controlar el tiempo dedicado y que usar teléfonos móviles era perjudicial para otras actividades. El comportamiento adictivo podría estar relacionado con otros problemas, dice el estudio, como el estrés, el estado de ánimo deprimido, la falta de sueño y la reducción del rendimiento en la escuela.

"Los teléfonos inteligentes llegaron para quedarse y es necesario comprender la prevalencia de su uso problemático", dice uno de los autores del informe, Nicola Kalk, del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia del King's College de Londres. "No sabemos si es el teléfono inteligente en sí mismo el que puede ser adictivo o las aplicaciones que las personas usan. Sin embargo, existe una necesidad de conciencia pública sobre el uso de teléfonos móviles en niños y jóvenes, y los padres deben saber cuánto tiempo pasan sus hijos en sus teléfonos".

El estudio advierte que las adicciones "pueden tener serias consecuencias en la salud mental, por lo que es necesario investigar más sobre el uso problemático de smartphones".

Este estudio vuelve a poner sobre la mesa el difícil papel que tenemos los padres y educadores frente al móvil, la tablet, el reloj inteligente... ya no se trata solo de un juego o de una distracción sino que nuestros hijos y jóvenes corren un serio peligro en esta sociedad de "pantallas para todo", incluso para hablar y relacionarnos con los demás.

Las recomendaciones son muchas y variadas, desde que nuestros jóvenes no tengan móvil hasta cierta edad en que muestren ser responsables, o que tengan un móvil pero con acceso a internet restringido por una tarifa mínima a la que iremos añadiendo "extras" paulatinamente si muestran ser responsables con su uso.

¿Qué recomendación darías a padres y educadores sobre este tema?